Crónicas argentas —5
ALBERTO FERNÁNDEZ GOLPEADOR
LA VIOLENCIA DE GÉNERO PERONISTA
Roberto Montenegro
El ex presidente argentino Alberto Fernández y su ex pareja Fabiola Yañez
La ex primera dama argentina, Fabiola Yáñez, denunció el martes 6 de agosto al ex presidente Alberto Fernández por violencia de género. Lo hizo ante el juez federal Julián Ercolini luego de que se conocieran conversaciones entre ella y la ex secretaria de Alberto Fernández, María Cantero, en el marco de la investigación judicial de Nación Seguros. Dos días después, aparecieron imágenes de Yañez en las que se le pueden ver golpes en su ojo y brazo.
El juez Ercolini decidió imponer una medida de restricción perimetral y otras medidas restrictivas en el expediente en relación con la madre de su hijo. Fabiola Yáñez, denunció ante la justicia que su pareja, el peronista kirchnerista Alberto Fernández, la agredía físicamente mientras vivían en la Quinta presidencial de Olivos. La madre del niño Francisco Fernández, por voluntad propia, contactó este martes por la mañana al juzgado del doctor Julián Ercolini para solicitar la reapertura del anexo en el cual constan pruebas consistentes de varias situaciones de maltrato físico por parte del ex presidente hacia su pareja.
El juez Ercolini recibió la nueva denuncia y trabajó hasta primeras horas de la tarde para implementar una serie de medidas restrictivas que Alberto Fernández deberá cumplir de inmediato, incluyendo la prohibición de acercarse y limitar los contactos con su ex pareja y madre de su hijo. Fabiola Yáñez se enteró de que se iba a publicar el contenido de su renuncia a denunciar violencia de género, producto de una audiencia por Zoom que había tenido con Ercolini y otra funcionaria judicial el 27 de junio. En realidad, en ese momento no estaba en condiciones psicológicas para continuar con la denuncia, se trató de un aplazamiento.
En esa reunión, Yáñez ni siquiera quiso mirar cuando se le mostraron las fotos y chats con su voz y mensajes de texto que los peritos de la Policía Federal habían encontrado en el teléfono de María Cantero, la secretaria privada de Alberto Fernández y, al menos en algunas ocasiones, su confidente en la angustiosa situación que estaba atravesando.
La joven aún no había superado del todo el mal trago, y sus conocidos la escucharon quejarse sobre el olvido y las supuestas dificultades económicas que enfrenta junto a Francisco en Madrid. En medio de graves insultos y reproches, Yáñez advirtió que reactivaría la denuncia que había decidido no presentar.
Fernández todavía no ha logrado salir del estado de shock en el que quedó tras el fin de semana, aunque está convencido de que la madre de su hijo busca «someterlo a una extorsión extrema para obtener dinero». En esas horas, el miserable del peronista Fernández, ha considerado ideas oscuras y pensó en responder con una crítica severa sobre Fabiola, sus costumbres y hábitos.
Pero sus amigos le habían advertido que no sería una buena idea ensuciar a la víctima de su violencia, ya que esto no mejoraría su imagen pública. Además, argumentan que sería difícil enfrentar una extorsión basada en un hecho que el ex presidente Alberto Fernández sigue negando frente a unos pocos. La principal preocupación del juez Julián Ercolini es mantener el expediente libre de contaminaciones mientras continua la investigación sobre el presunto fraude multimillonario al Estado relacionado con la contratación de intermediarios amigos en pólizas de seguros entre organismos públicos.
Se difundieron dos imágenes de la ex primera dama Fabiola Yáñez, golpeada, este jueves 8 por la noche. En las imágenes se pueden ver los moretones en su cara y su brazo, y capturas de pantalla de chats de WhatsApp entre Yáñez y Fernández, donde él le pide que vuelva y ella le responde que la somete a fuertes situaciones de violencia, «Venís golpeándome hace tres días seguidos», le reclama. De las capturas se desprende que las golpizas ocurrieron en agosto de 2021, durante la pandemia.
Los diálogos en WhatsApp entre Alberto Fernández y Fabiola Yáñez:
-F. Y: Ya iré
-A. F: Me siento mal físicamente
-F. Y: Esto no funciona así. Todo el tiempo me golpeás. Es insólito. No puedo dejar que me hagas esto cuando yo no te hice nada. Y todo lo que trato de hacer con la mente centrada es defenderte y vos me golpeás físicamente. No hay explicación.
A continuación, Yáñez adjunta una foto de un moretón en su brazo.
-A. F: Pero dejá de discutir, al final terminamos peleados nosotros por todos los demás. Por favor. Vení
En otra captura se lee la siguiente conversación:
-F. Y: Me volvés a golpear. Estás loco
-A. F: Me siento mal
-F. Y: Venís golpeándome hace tres días seguidos
-A. F: Me cuesta respirar. Por favor pará. Me siento muy mal
-F. Y: Y cuando me zamarreaste de los brazos me dejaste moretones. Esto es cuando me zamarreaste (y adjunta imágenes).
Poco antes, el diario La Nación+ había difundido un video de la columnista Tamara Pettinato cenando con el expresidente en el despacho de la Casa Rosada. Es una grabación privada en la que sólo se la ve a ella bebiendo cerveza, pero también se escucha la voz de Fernández. Allí bromean con cortar una relación y la charla concluye con un «te amo» de parte de ella. «Yo a vos», le responde él.
Tamara Pettinato, a quien el público llama: «Pettigato» [gato, en Argentina se conoce con ese nombre además del felino a las mujeres que salen de noche a buscar hombres] ya había sido cuestionada en 2021 cuando su nombre apareció entre las personas que visitaban a Fernández en la Quinta de Olivos en pleno aislamiento por la pandemia. En la grabación se ve a la gata Tamara tomando una cerveza y haciendo la «V» clásica del movimiento Justicialista o peronista.
En 2021 se conoció que el nombre de la panelista había aparecido mencionado en el listado de los visitantes a la Quinta de Olivos del año anterior, cuando en el país regía el aislamiento preventivo, social y obligatorio. En aquella lista, figuraban también Úrsula Vargues, Florencia Peña y Sofía Pacchi. En ese momento Tamara Pettigato hizo un breve descargo. «A mí me incomoda bastante todo lo que está pasando. En estos días pedí no hablar del tema, porque no quería ponerlo en foco, pero viendo que sigo recibiendo insultos que me dicen gato, petera, puta, me parece bien decir algo», dijo Pettinato esos días.
En el video grabado durante la pandemia en la Quinta de Olivos y difundido por el canal de noticias LN+, en el que se ve a la periodista Tamara Pettinato, en un sillón, tomando un vaso de cerveza y hablando entre risas a la cámara mientras el golpeador serial Alberto Fernández la graba y le hace cuestionamientos sobre un supuesto vínculo.
En diciembre de 2021, el peronista Alberto Fernández, les decía a las mujeres: «Les prometo que el primer feminista voy a ser yo», les pedía a las mujeres que «no bajen los brazos, sigan con su pelea» por adquirir mayores derechos, y prometió que será «el primer feminista». Todo esto mientras usaba a su mujer Fabiola Yáñez de saco de entrenamiento en Olivos.
«Los hombres también tenemos que hacer un ejercicio de aprendizaje, porque venimos de esa cultura que diferenciaba y ponía en un segundo lugar a la mujer. Las mujeres nos enseñaron que eso era un mal modo de vivir juntos. No bajen los brazos, sigan con su pelea. Les prometo que el primer feminista voy a ser yo», decía con el cinismo propio de los políticos peronistas que se robaron todo el país.
Y en Primer Encuentro Federal del Plan de los 1000 días, el jefe de Estado decía: «Tenemos que trabajar por una sociedad más justa. Acá que hay muchas mujeres, por favor empodérense». «Siento que hemos dado un paso formidable. Le hemos dado a la mujer la posibilidad de decidir lo que ella crea mejor. En los dos casos el Estado está presente, y en los dos casos celebramos que las mujeres tengan ese derecho real de decidir», refiriéndose a la ley de los 1000 días y de la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE).
Además, el jefe de Estado decía sentirse «ridículo» al tener que pedir «terminar con la discriminación entre el hombre y mujer», pero indicaba que debe que aún debe «repetirlo porque la discriminación existe». En ese acto, Fernández se mostraba en público con la primera dama, Fabiola Yáñez, quien se encontraba cursando la semana 22 de embarazo. Fernández no dijo nada de golpear a las mujeres, y pensar, que los detractores del inútil Alberso Fernández, decían que durante su mandato no había pegado una. Pregúntenle a Fabiola si no pegó una, creo que pegó muchas.
La presentación judicial se realizó el mediodía del martes 6 de agosto, por medio de una comunicación virtual, a través de Zoom, con el juez Ercolini, en la que denunció a su ex pareja por violencia de género y hostigamiento. La información acerca de golpes y maltratos físicos, circuló durante días, luego de que la Justicia peritara el celular de la secretaria histórica de Alberto Fernández, María Cantero, a quien Yáñez habría acudido contándole los episodios que sufría.
El celular de María Cantero fue revisado en el marco de otra investigación contra Alberto Fernández, por supuesto tráfico de influencias para entregar negocios a su entorno. Este escándalo es una derivación inesperada de una causa que viene escalando y suma su capítulo a la historia de corrupción peronista como sistema dentro del Estado.
El ex presidente difundió un comunicado de dos párrafos para negar la acusación de su ex esposa. «Jamás ocurrió lo que ahora me imputa», dijo el boxeador frustrado, y prometió presentar pruebas a su favor ante la Justicia. El punto es que ya nadie le cree nada, agravado por la causa de los seguros, que dio por el suelo su intento de mostrase ajeno al tejido de las operaciones investigadas desde fines del verano.
Alberto Fernández, repite una vez más, lo habitual en estos casos que consiste en negar la acusación y de tratar de empantanar la cuestión, pero ya no cuenta con el apoyo de su partido. Como era de esperar, en vista de las internas políticas en el peronismo, la condenada ex presidente Cristina Fernández de Kirchner, habría ordenado a sus periodistas, los «ensobrados» que le pegaran a Fernández. El grupo izquierdista peronista La Cámpora, unos delincuentes corruptos, acusaron a Fernández de haber ejercido violencia contra la condenada Cristina Fernández de Kirchner, alias La Yegua.
Durante la pandemia Alberto Fernández hizo una gestión personal para facilitar la vacunación de Héctor Martínez Sosa, pareja de s su secretaria María Cantero, principal operador del negocio de las comisiones con los seguros. El ex presidente buscó siempre destacar que no estaba salpicado por denuncias de corrupción, como otros. Era, en rigor, un tiro por elevación a Cristina Fernández de Kirchner y al kirchnerismo duro, que le reprocharon no haber clausurado las causas contra Cristina y que ahora lo vive como una revancha personal.
Es imposible hablar de hechos aislados o picardías acotadas para asegurarse unas comisiones frente a la existencia del decreto que imponía contratar pólizas con Nación Seguros a todos los ministerios y organismos nacionales. Después, además, los chats expusieron las gestiones para favorecer a Martínez Sosa que involucraron desde la jefatura de Gabinete hasta dependencias variadas como Cancillería, Seguridad, Anses, Corredores Viales. Y que pusieron la atención sobre el mayor negocio, Gendarmería Nacional.
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Los chats se conocieron luego de que un medio accediera en exclusiva a esa documentación. Posteriormente, la Justicia encontró que el contenido que se hallaba en el celular excedía las sospechas por negociaciones irregulares del ex jefe de Estado, y dio un giro hacia la nueva causa por violencia de género.
Desde La Libertad Avanza, señalaron que el ex presidente mantenía un discurso que reivindicaba las políticas de género, en la que se gastaron millones de dólares en políticas de género, mientras, de acuerdo a la denuncia, golpeaba a su pareja, y aun cuando estaba embarazada. El legislador porteño Ramiro Marra, apuntó contra el ministerio de la Mujer. Marra, en su cuenta de X, le dio entidad a una versión que sostiene que Fabiola Yáñez acudió al organismo y no recibió respuesta.
Esa cartera fue disuelta luego de la llegada de Javier Milei a la presidencia de la Nación, y es uno de los principales blancos de críticas ideológicas y cuestionamientos hacia su eficiencia por parte de la actual gestión nacional. El diputado de la provincia de Buenos Aires, Agustín Romo, insistió en que fue Fernández quien reivindicó la importancia de contar con un ministerio que atienda las problemáticas de violencia de género en particular, y de las mujeres en general.
«Quiero imaginar que mis compañerEs del bloque PJ/K ya están preparando un proyecto de repudio para Albert y la ex Ministra de la Mujer que cuando Fabiola la llamo le dijo que ya se le iba a pasar y que no podía hacer nada. ¿Y el colectivo de los pañuelos green (sic), ya hicieron un comunicado no??????», ironizó la diputada provincial de Santa Fe, Amalia Granata.
La diputada nacional por la Ciudad de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, fue de las primeras en reaccionar frente a la confirmación judicial de las versiones que circulaban desde hace días. «Crearon y usaron al Ministerio de la Mujer para cubrir sus propios delitos, mientras Alberto Fernández violentaba a su pareja en la intimidad de su casa. Alberto es un golpeador y el kirchnerismo lo encubrió. De eso no se vuelve», dijo Vidal.
La senadora Juliana Di Tullio fue una de las primeras dirigentes de Unión por la Patria, peronista, en expresarse, en medio del revuelo que generó la presentación judicial de la ex primera dama. «Le creo a ella», cerró su comentario en la red social X. No obstante, previamente había apuntado contra los dirigentes que señalaron a su espacio político por hacer silencio. «Dejen la hipocresía: a Uds. les importa tres almendritas si Alberto Fernández es un golpeador o no. A mí sí y mucho», dijo Di Tullio, tratando de desenmarcarse de su actitud oportunista.
Alberto Fernández, además de golpeador, era un troll, es decir, un individuo que pasa su vida tratando de amenazar y molestar a la gente en las redes, ya se conocen esa perversa actividad del chaquetero Alberto Fernández, sobre sus chats eróticos con distintas mujeres. En la ciudad de La Plata, una mujer relató a un diario digital la experiencia que tuvo con Alberto Fernández. Según ella, el expresidente le mandó a los servicios de inteligencia para hacerla callar.
La agencia NOVA, el medio que difundió la información, examinó los contenidos con detenimiento y concluyó que Alberto Fernández habría sostenido una situación comprometida tras una falta de fidelidad a su mujer. La señorita, identificada como Laly Belén, empleada en una entidad estatal de la provincia de Buenos Aires, reveló que, antes de asumir la presidencia, Fernández solía recorrer la ciudad para visitar su residencia. Ella, entusiasta de la política, le abría la puerta con amabilidad para mantener conversaciones.
Sin embargo, una vez Alberto Fernández asumió la presidencia, rápidamente se olvidó de Belén, alegando no conocerla. NOVA habría tenido acceso a información exclusiva que indica que el expresidente le prometió presuntamente muchas cosas a Belén y visitaba su hogar con intenciones de mantener una relación íntima. En los momentos en que habrían ocurridos los intercambios eróticos, Fernández estaba en una relación con la ex primera dama.
Es conocido que el presidente tiene la costumbre de chatear con mujeres a través de diversas redes sociales hasta altas horas de la madrugada, con el objetivo de llevarlas a la cama, sin embargo, una vez cumplido su propósito, se desentiende por completo de sus promesas. La víctima de Fernández en La Plata dijo que teme revelar los chats eróticos, ya que al ponerse en contacto con la agencia NOVA, descubrió que su celular estaba pinchado por servicios de inteligencia estatal. Estos servicios le habrían hecho advertencias amenazantes para que dejara de comentar el asunto con los periodistas.
El nazi bolche peronista Santiago Cúneo, quien militó por el ex presidente durante la campaña de 2019, expresó algo similar. Durante la pandemia de 2020, cuando ocurrió el caso del ex diputado Juan Emilio Ameri, quien le había besado los senos a una mujer durante una sesión de la Cámara de Diputados que se realizó vía Zoom, Cúneo relató en su programa: «¡Pero claro!, si el presidente tuitea con putas hasta las 6 de la mañana, ¿por qué el diputado no puede hacer esto…?».
«¿Por qué, si todavía están los audios y los WhatsApp del tarado (Alberto Fernández) que lo sigue haciendo, siendo presidente de la República y con la novia durmiendo en Olivos…? ¡Y sigue tuiteando el pelotudo…!», afirmó el pelado Cúneo, seguidor número uno del dictador Vladimir Putin. Y culminó: «Entonces el diputado sigue en la joda, si el presidente es putañero, todos son putañeros, porque está bien». Esa es la moral de otro peronista antisemita como Cuneo.
El presidente Javier Milei, se pronunció luego de la denuncia al ex presidente Alberto Fernández, y apuntó contra los defensores de las políticas de género porque son «una estafa de la cual se beneficiaron unos pocos, pero que financiaron todos los argentinos». Para Javier Milei, la solución para los delitos de violencia de género es «ser duros contra quienes lo comenten», en vez de «crear un Ministerio de la Mujer».
También apuntó contra los cursos de género y la contratación de «miles de empleados públicos innecesarios». Milei dijo: «Aumentar la burocracia estatal es una estafa moral, fiscal y politica. Es aprovecharse de un problema grave para hacer negocios».
«A pesar de sufrir constantes ataques y difamaciones, siempre tuvimos el coraje de decir la verdad. Sin importar las consecuencias. Porque ese es nuestro compromiso con la sociedad. Compromiso que cumplimos el día 1 de gobierno, terminando con esta estafa que titularon políticas de género. Una estafa de la cual se beneficiaron unos pocos, pero que financiaron todos los argentinos», concluyó Milei.
Además, dijo que el kirchnerismo utilizó esta problemática para hacer negocios y política, mientras que ellos fueron los únicos «en denunciar esta estafa». «Ellos pueden golpear, maltratar, violentar, robar y cualquier otra atrocidad pintados de verde [por el pañuelito verde] y mostrándose como aliados. Mientras que nosotros, que valoramos a cada individuo como un fin en sí mismo, somos los que venimos a cortar derechos, somos los violentos, etc.». «El camino al infierno está pavimentado de buenas intenciones», dijo Javier Milei.
A mí no me sorprende, el escándalo de Alberto Fernández, es una consecuencia lógica de un partido de delincuentes, como lo señalara Ricardo Veisaga, quien califica al peronismo como una asociación ilícita. Por donde pasó el peronismo dejó tierra arrasada por la corrupción, abuso, negociados y una maldita cultura de vivir del Estado, del resentimiento hacia el emprendedor, al que tiene negocios o dinero. Un partido de extorsionadores, planeros y piqueteros.
Finalmente, Fabiola Yáñez, aprovechaba y abusaba del poder político de su pareja, usaba el avión presidencial para visitar a su familia, en plena pandemia, su pareja, le hizo una fiesta en Olivos. Le sacó jugo a su posición, a veces en la vida, no todo es gratis. Existe un rumor muy fuerte, y hay periodistas que sostienen que el padre biológico del hijo de la pareja Fernández-Yáñez, no sería el ex presidente.
Así se pronunciaba Alberto Fernández en contra de la violencia de género (youtube.com)
8 de agosto de 2024, Buenos Aires, Argentina.