CUBA – NOTICIAS DE LA COLONIA
Cola para conseguir pan en Santiago de Cuba
El régimen socialista de Cuba anuncia que se dará inicio a un proceso penal «Como resultado de una rigurosa investigación se determinaron graves errores cometidos por el ex vice primer ministro y ex ministro de Economía y Planificación, Alejandro Gil Fernández», dice la nota oficial firmada por Miguel Díaz-Canel, que fue publicada por la prensa oficial y leída en la televisión. Alejandro Gil Fernández, se encuentra bajo graves imputaciones según la nota oficial, que amenaza actuar con «rigor» e «intransigencia» e insinúa sobre una supuesta «campaña del enemigo».
«Teniendo en cuenta el nivel de verificación de los hechos, y a propuesta de la Fiscalía General de la República, el Buró Político del Comité Central del Partido y el Consejo de Estado aprobaron que los órganos competentes del Ministerio del Interior iniciaran las actuaciones correspondientes para el esclarecimiento total de las conductas», dice que Gil Fernández ha reconocido «graves imputaciones».
El presidente de Cuba Díaz-Canel dice que, «como parte de la invariable ética de la Revolución cubana durante estos 65 años», la dirección del Partido y el Gobierno «nunca ha permitido, ni permitirá jamás, la proliferación de la corrupción, la simulación y la insensibilidad». Díaz-Canel vaticinó que «el enemigo (a quien le sigue comprando hasta calzoncillos) desatará una nueva campaña propagandística» contra el régimen y reclamó lealtades: «Nuestro pueblo, como nos tiene acostumbrado, se mantendrá firme al lado de su Partido y Gobierno, fieles al legado del comandante en jefe y a las enseñanzas del general de ejército Raúl Castro Ruz».
La caída en desgracia de Gil Fernández se produce, básicamente, por dos motivos: las pésimas noticias económicas, como el reconocimiento del fracaso de la «Tarea Ordenamiento», aplicada en enero de 2021, el hundimiento de la economía al cierre de 2023, y el fracaso anunciado del paquetazo, que el régimen vendió, pero sin éxito, como «medidas para corregir distorsiones» y que supone un empobrecimiento mayor de los cubanos y el incremento de la ya crítica inflación.
La otra razón obedece a una interna política desatada en la cúpula del régimen. Hace unos seis meses algunos analistas advirtieron que las últimas funciones a cumplir del ministro estarían en absorber el disgusto popular por el anuncio de que las cosas seguirán empeorando en Cuba. «Gil es el ministro de la Tarea Ordenamiento, de la inflación diseñada, del dólar a 120 pesos que ahorita cuesta 300, de la unificación de la monetaria, de las tiendas MLC, de los apagones, el hambre, la huida de cientos de miles de cubanos…», enumeraba entonces la economista Rafaela Cruz.
«Son antológicas sus mentiras con respecto a las tiendas MLC: su ‘el 2023 será un año mejor’ y el modo burdo en que presenta ante la Asamblea Nacional cuentas nacionales con crecimiento, cuando la debacle que vive el pueblo no admite matiz. Gil es el ministro bajo cuyas rúbricas se destruyó el cuentapropismo para armar con sus restos un sector ‘privado’ a gusto del Gobierno».
«El historial como ministro de Gil, en resumen, no merece despido, sino un juicio por genocidio, pero mientras llega el Núremberg cubano, lo que tenemos es a la Revolución devorando a uno de sus más incompetentes hijos, o a uno de los más fieles, si tenemos en cuenta lo bien que ha ejercido la misión de no hacer lo mejor por la economía, sino lo mejor para la dictadura, y eso disfrazarlo, empaquetarlo y venderlo como cambios positivos».
Tras su destitución, Alejandro Gil Fernández escenificó un último acto de «guataconería pública» (adulación), como dicen los cubanos. Agradeció a Díaz-Canel haber trabajado con él y se puso a sus órdenes.
«Gracias, Presidente @DiazCanelB. Ha sido un orgullo y un honor trabajar junto a usted al servicio de nuestro pueblo y de nuestra Revolución. Como siempre, estoy a la orden, para seguir #HaciendoXCuba”, escribió Gil en un mensaje en el que además incluyó las etiquetas de #YoSigoAMiPresidente y #UnidosXCuba.
Díaz-Canel había dado un «abrazo agradecido» a Gil Fernández y al resto de los ministros removidos. Entonces dijo el presidente que: «entregaron sus energías en años muy duros para el país» y prometió «tareas para seguir haciendo por Cuba».
Los rumores que circulan en ciertos sectores de Cuba, es que estaría en marcha una operación para desplazar a todo un sector del castrismo, demasiado ideológico, y propiciar un sistema más favorable a los negocios, encabezado por los militares. Es decir, el clásico gatopardismo. ¿Pero que hizo Gil? No hizo nada este inservible que no fuese aprobado «al máximo nivel», para utilizar el término con el que el capitán Miguel Ruiz Poo delató a Fidel y Raúl Castro durante el juicio-teatro a Arnaldo Ochoa y demás testaferros.
Pretender amarrar y quemar en una pira a Gil Fernández, puede ser un circo para la plebe, como gustaban llamar al pueblo cubano, pero culpar de manera individual al ex ministro de economía no resuelve el tema de fondo. Todos los cubanos por más aborregados que se encuentren, saben que en Cuba las decisiones no los tomaba Gil, por más ministro o vicepresidente que sea.
El verdadero objetivo de esta farsa no es la plebe, sino que apunta al sector del castrismo que asiste derrotado y ve que otro sector o camarilla, aniquila al colaborador más cercano de Díaz-Canel. Ya desde los tiempos de Fidel Castro el movimiento tiene dos ramas, por un lado, los políticos del Partido, y el otro, los militares. Es una norma muy común entre los jefes mafiosos, incentivar a sus subalternos a competir, pelearse, vigilarse, alcahuetearse y destruirse entre sí.
En tiempos de Fidel Castro tenía bajo control al Partido y a los militares le daban cargos empresariales cuando no quedaba otra salida. Pero más allá de las dos ramas el poder político lo tenía Fidel Castro y su círculo íntimo, en tanto que, el sector manejado por Raúl Castro tenía beneficios económicos, pero para nada poder. El día que Raúl Castro heredó el poder de su hermano Fidel, sus militares, que entonces ya concentraban mucha influencia empresarial, se acercaron a la antesala del poder, pero Raúl no aflojó el poder político.
El poder económico, militar y político no podía estar concentrado en un grupo que quisiera disputarle el poder al capo de la mafia, Raúl Castro, eso habría significado una abdicación de facto. ¿Qué camino le quedaba al decrépito Raúl Castro? Agarrar a un perejil sobreviviente del Partido paleolítico, Miguel Díaz-Canel, un bueno para nada y de probada incompetencia. Desde entonces estos dos sectores se están disputando los restos como perros carroñeros.
Obviamente que el botín es poco y no es lo suficiente para poder comprar fidelidades. En el artículo anterior hacíamos notar que el retraso de entrada en vigencia de ese engendro económico, llamado popularmente paquetazo, estaba siendo saboteado por el sector de Díaz-Canel, pero lo cierto es que no solo está saboteando el sector militar, sino que hay un ajuste de cuentas sobre el sector político al que Raúl Castro entregó la administración de la economía de la casa.
Fuentes de la disidencia cubana, hace notar que, desde el año pasado, el primer ministro Marrero, perteneciente al sector militar en la administración, había tomado protagonismo en los asuntos económicos e, incluso, llegando a desplazar a Díaz-Canel en cuanto a liderazgo dentro del Gobierno. No se sabe con certeza si estos «ajustes» están promocionados por Raúl Castro y familia, y que lo que buscan es encarrilar a Díaz-Canel, de quien Gil Fernández era su amigo personal y mano derecha. O tal vez cambiarlo por otro del sector político y mantener el statu quo.
De no ser así, estaríamos ante la insubordinación de la tropilla militar que quiere que el general Raúl Castro deba entregar el poder a los militares oficialmente, por ser los únicos que podrían garantizar el futuro del obsoleto y miserable sistema socialista. La farsa del régimen recién empieza, todas las personas vieron como el presidente felicitaba públicamente a una persona (Gil Fernández) que unas semanas después fue defenestrado como corrupto y traidor.
Todo parece indicar que el sector militar quiere desplazar al sector político-ideológico para instaurar un sistema más favorable a los negocios, y menos ideologizado, y ahí entrarían los militares que es donde más experiencia tienen. Esa situación podría ser el inicio de una dictadura donde se podría tener acceso al pan y a otros productos comprados al «enemigo», digamos que menos miserable, pero miserables al fin y sin libertad.
La persecución sigue su curso y hace unos días se pudo saber que el gobierno cubano habría arrestado a Fernando Javier Albán, uno de los empresarios privados más exitosos de Cuba, dueño de una MIPYME, AgroIndustrial Media Luna. La detención se habría llevado a cabo bajo cargos de corrupción, en un procedimiento abierto contra el ex ministro de Economía, Alejandro Gil Fernández. La MIPYME de Albán está ubicada en Ciego de Ávila y produce jugos de fruta y otros productos marca, Tuaba.
Las fuentes dicen que están investigando si Gil Fernández se benefició personalmente de su relación con Javier Albán. No habría pasado desapercibido como Albán habría convertido a Media Luna en una mediana empresa privada. Inicialmente Media Luna fue un «proyecto de desarrollo local», algo así como una asociación privado-estatal que tenía que ser aprobada por las autoridades municipales y pagar una gran parte de sus ingresos al Gobierno. Y además se le exigía exportar sus producciones a través de empresas estatales.
Javier Albán había sido un campesino de una cooperativa, que luego convirtió su negocio en la primera empresa privada autorizada en Ciego de Ávila. Cuando se le inició una investigación, el entonces ministro de Economía, Gil Fernández habría parado la investigación. Actualmente Albán está arrestado y se cree que hubiese sido trasladado a La Habana para nuevos interrogatorios, y que Media Luna está cerrada.
Javier Albán a través de Media Luna habría entregado millones de dólares al gobierno local, Ciego de Ávila es ciudad y municipio de la provincia homónima, ex Camagüey, también ayudó a reparar un hospital y una escuela, y recibió un premio de la oficialista Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba. En sus instalaciones de producción y su tienda en el bulevar de la ciudad de Ciego de Ávila, Media Luna exhibía carteles con la imagen de Fidel Castro y en la prensa oficial se efectuaban elogios a Media Luna y Albán.
El régimen cubano está acostumbrado a personalizar los fracasos y colectivizar los éxitos bajo el nombre de «Revolución», en este caso al fracaso de la economía socialista le pusieron el nombre de Gil Fernández, que era parte de la pirámide de poder cubano. El fracaso del régimen necesitaba un chivo expiatorio para cargar el fracaso del sistema. En Cuba existe no solo una crisis económica sino política.
La grave situación económica ha llegado a todos los productos, el pan nuestro de cada día ya no llega a la población, los cubanos forman filas en las MIPYMES, únicas panaderías que están ofertando con regularidad, pero que tampoco cubren la demanda. El desayuno es muchas veces el alimento diario para la gente, y si faltan los dos principales ingredientes como son el pan y la leche, la cosa se pone dramática. El gobierno ha salido a garantizar la leche de este mes y de abril, pero siguen los consumidores esperando su distribución.
«Hace días que no pasan los vendedores de pan de las MIPYMES», dice Roberto, recién jubilado de la Central Termoeléctrica Antonio Maceo (Renté). «Pensé que íbamos a comprarlo por la calle, pero parece que las MIPYMES tienen poca harina y hay que comprarlo en sus tiendas. Ayer fui a una y por el poquito de pan que sacaron a la venta había tremenda matazón. La solución es desayunar con viandas, un fufú de fongo (plátano) o yuca hervida, y un refresco de sobrecito, porque después de tantas horas de sueño, si sales sin comer algo, te desmayas».
El pan que antes pesaba 60 gramos, ahora ha pasado a pesar 25 gramos, no sea que terminen con obesidad. En Santiago de Cuba, los días del mes de marzo los mandados de la libreta de racionamiento están retrasados, y en las bodegas que han recibido algún producto se arman peleas para conseguirlos, y en general, llegan incompletos. Los clientes que acuden tarde a comprar no lo consiguen, y nadie garantiza de que el faltante llegue.
«Llegaron cuatro libras de arroz para los niños», dice Katia, que tiene un bebé de 14 meses. «Por lo menos puedo hacerle crema de arroz. No hay pan, ni leche, aunque dijeron que la compraron, todavía no ha llegado a la bodega. El niño va al círculo y yo le dejaba un pan a escondidas a su educadora para su merienda, porque le están dando un jugo sin sabor, cuando tienen. Ahora ni eso. Lo estoy recogiendo al mediodía para que no pase hambre, por lo menos en la casa se le inventa algo».
La calidad de los panes que se venden fue cayendo en picada. Se ha reducido el gramaje de harina y aceite, y el resultado es un pan seco, de cáscara quebradiza y al que le falta cocción, esto último debido los constantes cortes de electricidad, que interrumpen y merman la producción diaria. Las autoridades de la empresa alimentaria de Santiago de Cuba, para estirar la poca harina de la que disponen, han autorizado agregarle viandas. Con la afición del régimen por los eufemismos, estas adiciones fueron denominadas «extensores». La calabaza y la yuca son los «extensores» más habituales.
Un panadero da la receta. «Nos entregan 100 libras de yuca y, una vez hervida la misma, agregamos siete libras por cada pesada de harina (60 libras) para elaborar el pan. Lo mismo ocurre con la calabaza. Esta solución ha permitido que no haya que enviar a ningún trabajador para su casa. Si hay poca harina, usamos los extensores y tenemos contenido de trabajo».
«El pan era la base para sobrevivir a la hambruna de todo el mundo, niños y adultos», dice Lucía, ama de casa del distrito José Martí. «Hace cinco días que no nos llega el pan. Esta escasez de harina nadie se la esperaba. El retraso de los mandados, la carne y las viandas caras, todo eso se sobrellevaba porque podíamos comer un pedazo de pan con cualquier cosa, o solo. Ahora sí estamos en hambruna. El Gobierno nos está matando de hambre. Además de leche, debería pedir (a la ONU) harina, azúcar y arroz». La ausencia de leche afecta principalmente a niños y personas enfermas, pero la del pan afecta a toda Cuba.
Siguiendo el artículo anterior, podemos asegurar que enero de 2024 es récord en las importaciones de los Estados Unidos, las exportaciones de productos agrícolas y alimenticios de Estados Unidos a Cuba se disparó en enero de este año en un 39,4% en comparación con el periodo igual de 2023, totalizando 45.168.873 dólares. Ahora Cuba es el mercado número 41 entre los principales destinos del país «enemigo», y que ejerce el maldito bloqueo.
Las compras de pollo suponen el mayor volumen de las ventas, entre cuartos de pierna congelados, carne, muslos y despojos de pollo, más pollos enteros, las adquisiciones sumaron en enero 33.012.368 dólares. 2.853.680 dólares en soja, 1.283.853 en carne de cerdo, 608.106 en carne de bovino, y 302.612 en café. Cifras menores de alitas de pollo, pavo, tocino, huevos, cebollas, aceitunas, manzanas, arroz, salchichas, pasta, papas fritas, mantequilla de maní, agua embotellada y helado aparecen en los registros.
Al resumen mensual se suman 31.070 dólares en exportaciones de productos para el cuidado de la salud y 1.920.522 dólares en donaciones humanitarias. Sobre los primeros, el régimen de Cuba niega que Washington permita esas compras, culpando al embargo de la crisis del sistema sanitario de la Isla. Aunque el Gobierno y la prensa oficial lo callen, Estados Unidos, fue el sexto país del mundo con mayor volumen de exportaciones a Cuba, todas las exportaciones están autorizadas, pese al embargo, en virtud de la Ley de Reforma de Sanciones Comerciales y Mejora de Exportaciones (TSREEA, por sus siglas en inglés) de 2000.
Esta grave situación económica y la falta de libertades políticas aumentó la política de represión, abusos contra personas de libertad, detenciones arbitrarias, amenazas y acoso. Durante el mes de febrero, el grupo de asesoría legal Cubalex registró 244 violaciones de los derechos de las personas y abarcan 598 acciones represivas. Los hechos más frecuentes fueron abusos contra personas privadas de libertad (99), detenciones arbitrarias (70), amenaza o coacción (43), y violencia o acoso (41).
El preso político Roberto Pérez Fonseca, el opositor Oscar Sánchez Madan y la líder de las Damas de Blanco, Berta Soler Fernández, figuran entre los que sufrieron mayor cantidad de agresiones. Entre las organizaciones más reprimidas están la Damas de Blanco, la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), el Movimiento Opositores por una Nueva República (MONR) y el movimiento Cuba Primero, aunque la mayoría de las víctimas no está afiliada a organizaciones de la oposición o la sociedad civil.
Las amenazas registradas durante el mes fueron realizadas por oficiales de la Seguridad del Estado, policías, autoridades penitenciarias y paramilitares. Estos hechos ocurrieron en las cárceles y, también, durante detenciones, citaciones policiales e interrogatorios. La amenaza más frecuente es el encarcelamiento, pero en este apartado los miembros de Cubalex subrayan la propensión de las autoridades a fabricar delitos, afectar a familiares, practicar desalojos y expulsiones del centro de trabajo. Se realizaron los juicios contra el activista Yasmany González Valdéz y el opositor Frederict Otero Angueira.
La fiscalía solicitó para ambos seis años de privación de libertad por los supuestos delitos de propaganda contra el orden constitucional, por expresar desacuerdos con el régimen mediante pintadas y consignas, respectivamente. «Desde Cubalex queremos llamar la atención sobre el patrón de hostigamiento que se ha desarrollado durante el mes contra los miembros del recién surgido movimiento Cuba Primero. También sobre el acoso contra los presos políticos Juan Enrique Pérez Sánchez, Roberto Pérez Fonseca y José Daniel Ferrer García», destacaron.
Otra noticia preocupante es que el petróleo de México a Cuba tendría sus días contados. La estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), la empresa de su tipo más endeudada del mundo, y que desde 2023 sostiene envíos millonarios de petróleo a Cuba, en virtud de la alianza entre los izquierdistas Andrés Manuel López Obrador y Miguel Díaz-Canel, enfrenta un difícil en 2024 debido a una deuda de alrededor de 8.000 millones de dólares con sus proveedores, el incremento de sus gastos operativos y la reducción de su margen de utilidades.
De acuerdo al reporte de Reuters, que cita el informe de desempeño empresarial de la compañía a partir de datos oficiales, de octubre de 2023 a febrero de 2024 los pasivos o deudas de Pemex con los proveedores y contratistas registraron un aumento de casi el 44%, hasta los 139.115 millones de pesos mexicanos. Según el reporte publicado, la empresa tiene obligaciones ya facturadas, que vienen de 2023, del orden de los 138.845 millones de pesos mexicanos, mientras que al cierre de febrero tenía pendientes de facturar cargamentos por 270 millones de pesos.
Aunque el Gobierno federal le ha inyectado a Pemex 1,6 billones de pesos en los últimos años, los resultados de la empresa siguen a la baja, enfatiza Reuters. En 2023, las utilidades se desplomaron un 10% respecto a 2022, apenas dos puntos porcentuales por encima de 2020. También en los últimos 12 meses los gastos operativos de Petróleos Mexicanos se dispararon en un 35,7%, para alcanzar el récord de 228.220 millones de pesos, cifra equivalente al 13,3% de sus ventas.
En cuanto a su desempeño, registró una caída del 2% en la elaboración de petrolíferos, hasta los 896.546 barriles diarios, mientras que la extracción de crudo apenas se elevó un 5,1%. El informe no incluye la deuda derivada de disputas o impuestos, ni los proyectos en procesos de conciliación con acreedores. Durante meses, la endeudada compañía energética enfrentó serias dificultades para pagar a proveedores, contratistas y operadores petroleros, quienes dijeron que la falta de cumplimiento podría provocar caídas en la producción y amenazar a las empresas privadas. Dos fuentes de Pemex dijeron a Reuters el mes pasado que la compañía usaría un reciente crédito fiscal de 6.400 millones de dólares del Gobierno para realizar pagos a esos acreedores.
Desde fines del primer trimestre de 2023, el gobierno mexicano, a través de Pemex, suministró al menos 2,8 millones de barriles de petróleo a Cuba, en lo que el gobierno de Andrés López Obrador describió como una donación humanitaria a «un pueblo que sufre un bloqueo inhumano e injusto». ¡Bravo, AMLO! Abrazos y no balazos, y hagamos el sexo rico, mientras se jode el país.
En el transcurso del pasado año, México transfirió combustible a Cuba por un valor estimado de 200 millones de dólares. Desde el primer trimestre de 2023, los petroleros cubanos Vilma y Delsa, utilizados anteriormente para transportar crudo desde Venezuela, hicieron escalas en terminales mexicanas. Ello convirtió a México en el segundo mayor suministrador de petróleo a Cuba, solo por detrás de su aliado ideológico político venezolano.
Antes de 2023, México solo había enviado cargamentos de petróleo a Cuba esporádicamente. Pese a ello, Pemex no ha revelado detalles financieros sobre la naturaleza exacta de sus transferencias a Cuba, lo cual podría indicar un intento por ocultar las violaciones de las sanciones de Estados Unidos contra La Habana.
En enero pasado, Ryan C. Berg, director del Programa de las Américas y jefe de la Iniciativa del Futuro de Venezuela en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS, por sus siglas en inglés) en Washington D.C., indicó que «Venezuela está lejos de ser el socio energético que alguna vez fue» para Cuba.
«Las exportaciones de petróleo venezolano a Cuba promediaron casi 80.000 barriles por día (bpd) en 2020, en comparación con 55.000 en el transcurso de 2023, una disminución de más del 30%. (…) Los crecientes costos de oportunidad asociados con el suministro de petróleo con descuento a Cuba por parte de Venezuela han hecho que el régimen de Maduro, con problemas de liquidez, priorice las relaciones económicas con países capaces de pagar en divisas. Esto, a su vez, ha obligado a Cuba a forjar relaciones con nuevos socios para llenar los vacíos en la oferta, sobre todo México», indicó.
Asimismo, advirtió Ryan Berg, «el Gobierno de López Obrador ha profundizado su relación energética con Venezuela (…) con el objetivo de desarrollar proyectos conjuntos». En lo que respecta al pago por los cargamentos de petróleo mexicanos, el experto señaló que «es poco probable que la Isla haya compensado a México por cerca del valor estimado de 200 millones de dólares en energía que le ha proporcionado, y es más probable que forme parte de un esquema de petróleo por servicios, como el acuerdo médico extendido en septiembre de 2023 por el Gobierno de López Obrador».
«Teniendo en cuenta que Pemex hace uso de préstamos del Banco de Exportación e Importación de Estados Unidos (EXIM) para financiar sus operaciones, es imperativo que Estados Unidos busque una mayor claridad de sus contrapartes mexicanas sobre la naturaleza de las transferencias de petróleo entre México y Cuba. Sin embargo, el liderazgo de Pemex bajo AMLO aún no ha revelado detalles financieros sobre la naturaleza exacta de las transferencias», agregó.
Ryan Berg recordó que la producción de petróleo crudo de México «disminuyó en casi un tercio entre 2004 y 2010, lo que llevó a una serie de reformas que introdujeron la competencia de las compañías petroleras privadas extranjeras y culminaron en una reforma constitucional en 2013. Esto puso fin al monopolio de Pemex y hundió a la empresa estatal en el endeudamiento. En 2023, la deuda de la empresa superó los 100.000 millones de dólares, equivalente al 8% del PIB de México».
«A medida que se acerca el final de su mandato, López Obrador dejará a Pemex en una posición más precaria que cuando asumió el cargo en 2018. (…) Con una mentalidad congelada en el modelo de desarrollo estatista de los años ininterrumpidos de Gobierno del Partido Revolucionario Institucional, la responsabilidad de rescatar o reestructurar a Pemex recaerá inevitablemente en el sucesor de AMLO».
Ryan Berg recordó que, si bien las sanciones del embargo no impiden a Pemex enviar embarques a Cuba, esto no la exime de violar las normas de la denominada Ley Helms-Burton. «En 2022, en virtud de esta ley, un juez federal ordenó a cuatro líneas de cruceros pagar más de 400 millones de dólares en daños y perjuicios por atracar en puertos que antes pertenecían a Havana Docks Corporation, una empresa estadounidense expropiada por Fidel Castro. Aplicando una lógica similar, los petroleros mexicanos que descargan sus cargamentos de energía en puertos expropiados por el régimen, podrían enfrentar una exposición de riesgo similar».
«La falta de transparencia de la Administración de AMLO con respecto a la naturaleza exacta de sus transferencias a Cuba hace que sea complicado determinar si Pemex ha cometido violaciones técnicas de las sanciones de Estados Unidos. Sin embargo, el petróleo a Cuba en condiciones opacas podría interpretarse como una violación del ‘espíritu de la ley’ y, peor aún, como un desvío de dólares de los contribuyentes estadounidenses para apoyar indirectamente al régimen autoritario sancionado de Cuba», alertó Berg.
El dictador ruso Vladimir Putin, aprobó reestructurar otra vez la deuda millonaria del régimen de Cuba, el ruso aprobó la modificación de los acuerdos de créditos entre Moscú y La Habana que otorga a Cuba mejores condiciones para el pago de una millonaria deuda, así como su reestructuración. El documento que avala la decisión presidencial fue publicado en el portal de información legal del Gobierno ruso. Los protocolos aprobados por Putin, se refieren a los acuerdos de créditos estatales para Cuba otorgados entre 2009 y 2019 para la compra de hidrocarburos.
Según el viceministro de Finanzas de Rusia, Alexéi Sazánov, la deuda contraída por Cuba en el marco de los acuerdos cuya reestructuración fue aprobada, asciende a 277.2 millones de dólares. Las facilidades otorgadas a Cuba incluyen la posibilidad de saldar la deuda en rublos, postergar el plan de pagos de 2023-2027 al período 2028-2040 y modificar el cálculo de las tasas por la demora de los pagos.
Rusia consideraba que la ayuda al régimen de Cuba, dirigida a garantizar su abastecimiento de crudo, fortalecería las posiciones políticas de Moscú en Iberoamérica, pese a que esos suministros hoy apenas existen y Cuba vive su peor crisis eléctrica desde 2022, con apagones simultáneos en hasta el 44% del territorio nacional e incrementos de los precios de la gasolina por encima del 400%, así como la dolarización parcial de su venta.
En abril de 2023, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, visitó Cuba y, según el periódico ruso Kommersant, anunció que Rusia y Cuba casi habían completado el acuerdo sobre los términos bajo los cuales se reestructuraría la deuda de la Isla con el Kremlin. A la altura de febrero de 2022, esa suma ascendía a 471 millones de dólares, según ese reporte. En agosto de ese mismo año, Rusia concedió al Gobierno de Cuba la prórroga hasta 2040 de los pagos de un préstamo para la construcción de una central eléctrica que nunca vio la luz, y sobre cuyo destino La Habana nunca ha rendido cuentas.
Cuba debía pagar intereses de ese préstamo por un monto de aproximadamente 1,4 millones de euros. Inicialmente, esta suma debía pagarse antes del 28 de febrero de 2022, pero fue diferida para que sea saldada el 15 de junio de 2025. El monto de intereses que Cuba debió pagar a partir del 1 de marzo de 2021 hasta finales de 2022, equivalente a unos 2,2 millones de euros, podría comenzar a honrarse a partir del 15 de junio de 2028 y ser completado a mediados de diciembre de 2040.
En cuanto a la deuda principal, así como una serie de pagos diferidos e intereses capitalizados que Cuba debió pagar comenzando en enero de 2023, para ser honrada en su totalidad a finales de 2027, también fue desplazada a entre junio de 2028 y diciembre de 2040. También la devolución de ese préstamo se hará en rublos, pues anteriormente se trataba de una suma en euros.
En 2015, Rusia firmó un acuerdo con Cuba para proporcionarle un crédito estatal a la exportación de hasta 2.200 millones de euros. Esos fondos serían destinados, según fue reportado entonces, a proyectos de construcción de unidades eléctricas en las centrales térmicas cubanas Máximo Gómez, en Mariel, y Ernesto Guevara, de Santa Cruz del Norte, indicó la agencia rusa Interfax. Una unidad de potencia de 200MW se construiría en la primera, y otras tres de igual potencia en la segunda.
La implementación del proyecto por la parte rusa correría a cargo de la empresa Inter RAO – Export, líder del sector en la nación euroasiática. Los términos iniciales del préstamo asumieron su uso entre 2016 y 2024. Cuba lo pagaría en diez años, con los primeros desembolsos al año del lanzamiento de las unidades de energía, que, según el acuerdo original, sería a más tardar el 1 de febrero de 2025.
El préstamo se otorgó con un interés del 4,5% anual. Sin embargo, desde entonces no ha habido informes del inicio inmediato del trabajo en el proyecto. La prensa oficial cubana no menciona este tema, pese a que se trata de una nueva deuda que se suma a los miles de millones que debe el Gobierno cubano, que pocas veces honra los préstamos que recibe. En 2022, la prensa oficial rusa reveló que Rusia había prestado a Cuba 2.300 millones de dólares entre 2006 y 2019 para financiar importantes proyectos de energía, industria metalúrgica y transporte.
En febrero de 2022, horas antes del inicio de la invasión de Ucrania, la Duma (cámara baja de la Asamblea federal de Rusia) ratificó un proyecto de reestructuración de la deuda de 2.300 millones de dólares, que el presidente de esa entidad negoció en un viaje a La Habana. Los reportes de entonces indicaron que desde 2020 el Gobierno cubano dejó de pagar la deuda y solicitó a Rusia revisar las condiciones del crédito. En respuesta a esta petición, el 11 de junio de 2022 Vladimir Putin ratificó los protocolos para enmendar los acuerdos firmados y aplazar los pagos.
En 2014, Putin había condonado el 90% de la deuda de Cuba de tiempos de la URSS, ascendente a 35.000 millones de dólares, de los cuales el régimen de Raúl Castro solo tendría que devolver 3.500 millones.
¿Con que está pagando el régimen cubano a Rusia? Unos 400 mercenarios cubanos estarían peleando en la guerra de Ucrania, según oficiales rusos, pero ahora se sabe que la cifra es mucho mayor. El cubano Raibel Palacio Herrera, murió en enero en Ucrania y estaría enterrado en una fosa común.
La esposa de Palacio, Melissa Flores, contó al medio estadounidense The Wall Street Journal, que el joven fue enterrado sin ninguna ceremonia y ofreció detalles sobre su muerte, que conoció a través de un amigo de su pareja que también fue reclutado para pelear en el bando ruso. «Me dijo que Raibel había recibido un disparo de un dron en la pierna y que se había desangrado mientras intentaba ponerse un torniquete», «Me dijo que lo habían enterrado en una fosa común, sin ninguna ceremonia ni bandera», añadió la viuda.
La muerte de Palacio, quien había sido reclutado por el ejército ruso en noviembre de 2023, transcendió en enero, a través de un reporte del canal estadounidense de televisión Univisión 23 Miami. Un presunto alto oficial del Ejército ruso le había escrito un mensaje de texto por WhatsApp a la familia del joven, que fue citado por el medio estadounidense.
«Con un dolor inmenso debo informarle que hoy nos trajeron la noticia de que Raibel fue alcanzado por un dron, resultando en su fallecimiento junto a otro compañero que se encuentra gravemente herido. Mi más sentido pésame y el de todos los compañeros que estamos aquí», dijo el supuesto oficial, a quien la familia de Palacio tenía registrado en sus contactos con el nombre Gilberto Herrera Shuman. Esa misma persona envió un video de los hechos, publicado por autoridades rusas. Las imágenes que llegaron a la familia de Palacio pertenecían a un reporte del combate que había hecho el canal de televisión argentino Canal 26.
El relato del amigo de Palacio a su viuda parece demostrar que el Ejército ruso nunca tuvo intención de hacerle llegar el cuerpo a la familia. Palacio es uno más de los cubanos que optaron por una guerra que no les pertenece y como forma de escapar a la miseria que vive Cuba, van a pelear por los rusos y no pelean en la isla para derribar el régimen que los hundió en la miseria más profunda. Según el diputado ucraniano Maryan Zablotskyi, quien estima que hay entre los 1.500 y 3.000 cubanos enrolados en el ejército invasor ruso.
En octubre de 2023 los hackers informáticos ucranianos del grupo Cyber Resistance develaron pruebas de la contratación de más mercenarios cubanos por las Fuerzas Armadas rusas en la guerra contra Ucrania. El supuesto desmantelamiento de la red de reclutamiento de mercenarios, esta solo habría sido una «cortina de humo» para disimular un «posterior envío de fuerzas regulares a Ucrania».
Un cubano enrolado por Rusia y presuntamente capturado por tropas ucranianas en la zona de Marinka, en la región de Donetsk, fue publicado por un canal de Telegram vinculado con el Ejército de Kiev. El relato es una evidencia más de la contratación de mano de obra extranjera en la invasión rusa. El prisionero, que se identificó en el interrogatorio como Frank Darío (apellidos incomprensibles), nacido el 6 de septiembre de 1989 en Guantánamo, dijo que había firmado un contrato para trabajar en labores de construcción, a cambio de la ciudadanía rusa y un salario mensual de unos 250.000 rublos, equivalente a más de 2.500 dólares al cambio actual.
«en ningún momento nosotros sabíamos que teníamos que ir para la guerra. Veníamos a hacer labores de albañilería. Nos hicieron un contrato en ruso, que nosotros no entendíamos… Cuando te vienes a dar cuenta, estás en un búnker tirando tiros», dijo el cubano. En la unidad en la que él terminó había 35 cubanos. Una mentira infantil de Frank Darío ¿Cuándo le dieron uniforme militar y le colocaron un arma en la mano, estaba trabajando de albañil? Ahora, que lo chinguen.
Raibel Palacio Herrera no es la primera vida cubana que se pierde en la invasión rusa contra Ucrania. Poco antes Yansiel Morejón Díaz murió en Ucrania peleando para el bando ruso.
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El grupo de Militares disidentes cubanos lamentaron la respuesta del régimen a la crisis que atraviesa la isla, y advirtieron que las medidas que está tomando la dictadura caribeña pueden encender la chispa de nuevas y masivas protestas en la isla. El grupo de militares objetores de conciencia expresaron su preocupación por la aparente operación de guerra psicológica que se comienza a desarrollar en torno a la destitución del ministro cubano de Economía y Planificación Alejandro Gil Fernández.
«Al igual que muchas veces en el pasado, se pretende centrar la culpa en uno o más funcionarios a fin de proteger a los mayores responsables por este desastre. Es también un viejo truco culpar a las personas y no al sistema por las miserias del país. A falta de pan, circo, dice el refrán. Pero los payasos y magos del circo Castro ya no impresionan al público», dice un comunicado publicado el lunes pasado por los militares disidentes.
En la carta, los militares señalan que la dictadura cubana ha escogido este momento de crisis para introducir medidas activas y narrativas que pretenden conectar con supuestos planes de la CIA el fracaso de las políticas en curso. De esta forma, llevan adelante una purga administrativa en un contexto de seguridad nacional y paranoia colectiva. «Eso no es solo peligroso para Gil, sino también para todos aquellos funcionarios civiles y jefes militares a los cuales puedan involucrar más tarde en una conspiración ficticia, tan inexistente como lo fue la de La Escalera en 1844, por la que fueron encausadas 3.066 personas de las que llevaron 78 al paredón de fusilamiento», advierten en el documento.
Y agregan: «En nuestro último comunicado expresamos preocupación por las informaciones que nos llegan de la Contrainteligencia Militar (CIM) de las FAR, y que apuntan a que Alejandro Castro Espín y un grupo de genuflexos oficiales de esa dependencia preparan listas para ejecutar nuevas purgas de ‘elementos no confiables’ de forma similar a la que ese sujeto implementó al tomar su padre las riendas del país. Ahora, cuando se aproxima su deceso, ¿de quienes desea deshacerse?».
También creen que, en este contexto, las protestas masivas del 11J puede retornar en cualquier momento, «pero esta vez como un huracán categoría 5». «Y nadie olvidará sus infamias», termina la carta.
13 de marzo de 2024.