

REVISTA EUTAXIA
DOS AÑOS DESPUÉS
Alejandro Soler
Hace dos años que se puso en marcha la Revista Eutaxia, hace dos años que un grupo de amigos, digamos, convencimos a Ricardo Veisaga B. a emprender el compromiso o la tarea de mantener en activo un medio de referencia para un grupo de personas que compartían la misma filosofía política. En este tiempo, desde su puesta en marcha se fueron sucediendo muchas cosas, tanto en las expectativas de la revista como en el mundo político-social en el que estamos inmersos.
Con motivo de este aniversario, pude realizar una entrevista a uno de los amigos del proyecto, un adherente, que nos compartirá su vivencia personal. En este caso se trata de Sergio Smith Canales, un joven estadounidense cuyos padres, como sucede muy a menudo en este país, son de dos nacionalidades, por tanto, también es bilingüe cosa que no siempre sucede y que habla a la perfección castellano o español y su inglés natal como es lógico, y lo hace tan bien que a veces nos preguntamos cuál de ellas es su lengua nativa.
Al amigo Sergio Smith, tuve el placer de conocerlo por medio de las redes y por algunas comunicaciones telefónicas, y luego, de manera personal en un encuentro en Alabama.
Alejandro Soler. —Tengo el conocimiento de que eres un viajero permanente y que recorres prácticamente por todo el país. Se que estuviste hace muy poco por el medio oeste, concretamente en Chicago.
Sergio Smith Canales. —Es cierto, viajo mucho, aunque cada vez menos, mis negocios me llevan a supervisar personalmente ciertos contratos. Estuve en Chicago, por dos razones, el trabajo y visitar al amigo Ricardo Veisaga, que en estos precisos momentos está viviendo una situación de salud bastante preocupante. A pesar de toda la situación tuvo el gesto de recibirme y compartir muchas horas conmigo, también aproveché para grabar un podcast de casi dos horas. Cuando la conversación es tan interesante las horas fluyen sin que nos demos cuenta. Sabes que estoy liado con el podcast desde hace unos años y la experiencia ha sido muy buena. Ya lo di a conocer y te invito a escucharla.
A.S: —Nos conocimos personalmente en Birmingham, Alabama, pero ya estábamos vinculados con anterioridad. Pero me gustaría que nos hablaras de tu involucración con el proceso de materialización de la revista y como llegaste a ella.
S.S.C. —Soy alguien adicto a navegar por internet y a leer, sobre todo, artículos u opiniones de corte político, filosófico, culturales, etc., digamos que, en búsqueda de una formación y definición personal, y en ese camino te encuentras con todo tipo de información. Hace unos cinco años, encontré con un artículo y me resultó interesante. Lo siguiente fue buscar mayor información sobre el autor, pero se trataba de un blog que cometía el mismo error de muchos, no tener un lugar de contacto. Tiempo después pude acceder a otro artículo y esta vez había una dirección de correo. Lo extraño de esto fue que el blog estaba ubicado en Filipinas y en español.
A.S: Al día de hoy eso no es una rareza, sé que, en muchos sitios, revistas, periódicos publican sus artículos, y lo peor es que lo hacen sin autorización, y en algunos casos lo publicitan como un trabajo especial para ese periódico.
S.S.C: —Es verdad, pero en este caso se trataba de uno de los cientos de personas que recibían artículos semanales, vía email. En aquel entonces los que recibían esos correos eran un poco más de seiscientas personas, obviamente, que eran reenviados o publicados en diversos medios. Esta persona de Filipinas fue muy amable y me dio mucha información al respecto y, además, me agregó a la cadena de correos. En poco tiempo me puse en contacto con Ricardo Veisaga y así empezó una larga relación a la distancia.
A.S: —¿Y cómo fue esa interacción?
S.S.C: —Desde un principio se declaró seguidor del sistema del Materialismo Filosófico y de Gustavo Bueno Martínez. Entonces yo ignoraba sobre el sistema y me fue muy útil recibir toda esa información. También me dejó en claro que él no seguía personas sino ideas. Durante ese tiempo, mientras hablaba con muchas personas, nos dimos cuenta que era necesario desplegar estas ideas, pero en un lugar concreto y en nuestras propias circunstancias. Esa pretensión no significaba aislarnos del resto del mundo, pero era necesario contar con un medio propio.
A.S: Entiendo, pero existían algunas razones para que eso no existiera, como muchas veces me dijo Veisaga, una cosa era escribir sin ataduras, a veces tres o cuatro artículos semanales o a veces nada, no había que cumplir una cierta regularidad y muy distinto asumir un compromiso cuando se trata de un medio propio.
S.S.C: —Entendemos eso, es un argumento fuerte y encima había que agregar que no tenía una apoyatura técnica e intelectual, es decir, no tenía colaboradores para escribir artículos, cosa que debo admitir, no ha cambiado mucho ya que todo corre por su cuenta, en ese sentido no fuimos un apoyo. Para una persona que no maneja o es ajeno a la tecnología de páginas web, que ignora como mantener y subir los artículos a la página, es un enorme problema. Tengo entendido que le costó mucho trabajo conseguir quien pudiera desarrollar la página (hay muchos aprovechados en estos medios) y la persona que se encargaría de mantener actualizada la misma, no gratuita, se entiende. Otra cosa, nunca recibió dinero ni de amigos ni extraños para la revista, se niega en rotundo, todo corre por su cuenta. La persona que lo hace es de la India y todo marcha bien. Cuando supimos que sería una realidad la revista, pensamos y le propusimos recopilar artículos de años anteriores, ya que consideramos que era importante mostrar la línea permanente de pensamiento y de temas que aun eran actuales. Entre amigos conseguimos un 40% de los artículos, aunque en este tiempo han aparecido otra gran cantidad de ellos, pero consideramos que ya es un poco tarde para agregarlos.
A.S: —Pero ahora ya surgieron algunos colaboradores en el país y en otros países, en especial en estos momentos de su problema de salud.
S.S.C. —Es cierto, pero tenemos conciencia de que en algún momento no contaremos con él, y bueno, creo que habrá un compás de espera y en algún momento alguien continuará con la misma o con nombre diferente, son cosas que suceden en la vida, nada es para siempre.
A.S. —¿Podrías ampliar sobre este emprendimiento lo positivo o negativo?
S.S.C. —Muchas cosas positivas, para empezar un lugar común para las personas que compartimos la misma filosofía política, y la libertad que se da en ella. Voy a dar un ejemplo, cuando nos reunimos en Alabama todo se dio con espontaneidad, en principio nos íbamos a reunir un grupo que no excedían las veinte personas, la presencia generosa de Ricardo Veisaga, y finalmente el boca a boca, atrajo a cerca de cien personas, gente que viajó 10 o 12 horas manejando, desde el Pacífico sur al sureste del país, del sur de California a Florida. En la reunión no hubo nadie tomando los datos de las personas, es cierto que muchos ya nos conocíamos, aunque no de manera personal. Nunca se fijaron compromisos ni órdenes o tareas a cumplir. Podríamos haber realizado otra juntada pero no lo hicimos, ya habrá lugar y tiempo.
A.S. —Por distintas vías me fui enterando que el número de amigos de la revista se fue aumentando y en casi todo el país.
S.S.C. —En mis viajes así lo pude comprobar, también Ricardo Veisaga me dio algunos contactos en el noroeste del país, en estados como Dakota, Montana, Idaho, Washington y Oregón. Lugares un poco lejanos, pero que no constituye ningún tipo de impedimento o excusa para no relacionarse. Mucho han contribuido los cursos de formación política impartidas por Veisaga. Estuvo en San Diego por tres días, y su pasaje se lo pagó él, lo mismo el hotel y eso nos pareció inadmisible, lo sacamos del hotel y lo hospedamos con nosotros. También, esos cursos fueron muy buenos ya que los más formados están dando cursos para grupos reducidos por la zona sur del país. No solo eso, nos vimos en la necesidad de traducir mucho material didáctico en inglés para muchas personas que no hablan castellano o español, y ese material nos es sumamente útil, ahora mismo ese sector es el mayoritario y pensamos que será el segmento que más va a crecer.
A.S. —Eso me sorprende mucho, y es gratificante. Como sabes, la Fundación Gustavo Bueno, como es lógico, es la heredera de la obra de Gustavo Bueno y en ella existen muchos intelectuales que pasaron o aún continúan ejerciendo docencia, también existen otros medios afines. ¿hay algún nexo entre ellos y ustedes?
S.S.C. —Nunca dejamos de reconocer la labor de la Fundación y la llamada Escuela de Oviedo, pero no, y eso obedece a muchas razones. Justamente el hecho de tener nuestro propio medio como referencia, marca la distancia entre la filosofía política del Materialismo Filosófico de Europa y la nuestra, incluyendo en esa distancia a que no seguimos al pie de la letra la evolución posterior de ese grupo. En cuanto a la filosofía política, llegamos a un punto donde paramos y no compartimos lo que van agregando. Alguna vez Ricardo Veisaga dijo: «América para los americanos ¿Por qué no?, es obvio. ¿Por qué debería ser América para los rusos o los chinos?
A.S. —Sergio, ¿crees que ellos comulgan con esas potencias?
S.S.C. —No estoy hablando de la Fundación o de las personas individuales que comparten en general ese espacio, pero sí de la línea post-Gustavo Bueno, de la deriva posterior a su muerte. No es extraño para nada que dentro de la Escuela de Oviedo o de la Fundación, exista una media docena de intelectuales que son marxistas y otros que no se atreven a salir del closet, pero se delatan cada vez que en los medios se ataca al comunismo. De inmediato salen a pedir certificados de defunción de los muertos que ha provocado y sigue provocando esa nefasta ideología que trajo miseria y frustración a cientos de millones de personas. Vergüenza debería dar a estos apologistas de la ideología marxista. Tampoco es extraño esta costumbre de disfrazar el marxismo y salir en su defensa. Si usted puede acceder al Catoblepas, podrá constatar, si mal no recuerdo, que, hasta el mes de noviembre de 2016, había una sección dedicada a la china maoísta, denominada: «Ante la República Popular China». Ante la desaparición de esa sección en la revista El Catoblepas, pensábamos que habría alguna definición sobre el imperio chino, y como dijo cientos de veces Veisaga, nunca calificaron al imperio abusador chino como depredador, algo extraño en quienes gustan, y con toda razón, hablar de imperios depredadores y generadores. De cualquier manera, creo que están en su derecho tener su preferencia política y es cosa de ellos, pero es algo que no compartimos y por lo mismo nos mantenemos al margen. Tampoco es nuevo, ya en el 2002 había una sección llamada: «Desde la última Thule» dirigida por el marxista Tupamaro, Fernando Flores Morador, que luego reapareció en el 2009 y su último aporte fue en 2020. «Efraín» era su nombre de guerra como guerrillero, se había fugado de la cárcel de Punta Carretas, de Uruguay, y luego al paraíso izquierdista sueco, estos «tupas» se habían levantado en armas contra un gobierno constitucional en el Uruguay. ¿Y qué puedo decir? con los izquierdistas no tenemos nada que hacer. En la Escuela de Oviedo hay excelentes profesionales y no hay nada más que elogios sobre ellos, pero hay algunos extraviados que se ponen hablar sin ningún conocimiento de cosas que no conocen, me refiero a la política práctica. Hay neofascistas o neonazis, seguidores de Dugin, del Heidegger nazi, de la metapolítica, putinistas. Algunos intelectuales se creen que son expertos en globalismo y poder mundial, porque trituran o creen triturar el término globalización y en realidad, no pueden superar la etapa de los Morgan o los Rothschild, o no se enteraron que los WASP son historia pasada, se quedaron en el siglo pasado. Otros, se lanzaron por iberoamérica haciendo socialismo, elogiando gobiernos o movimientos estatistas que existieron durante la Guerra Fría, es decir, izquierdistas (porque todo estatismo es de izquierda), entrevistando a personajes nefastos como el peronista Guillermo Moreno, o las reuniones con neofascistas como Buela. Tenemos contactos con amigos de ese país y manejamos información sobre esos grupúsculos. Guillermo Moreno, está condenado por la justicia argentina, un manipulador que se jactaba de negociar con los empresarios con una pistola sobre la mesa. Luego de caer en desgracia, armó un partidito político y fue derrotado por una joven peronista de dudosa reputación (disculpen, pero ser peronista es no tener reputación), que hacía campaña semidesnuda bailando un tango, a Guillermo Moreno no lo votó ni la mujer. Esto demuestra la pésima política emprendida por los jóvenes materialistas, ya que comprometen la figura de Gustavo Bueno Martínez al promocionar a gente nefasta en la vida política, también exhibe la pobre capacidad política de no conocer a la gente, en definitiva, son intelectuales que descubren la vida política y se meten en terrenos que les son ajenos y no saben lo que hacen, eso significa tener menos calle que una ballena. Lo mismo con Ismael Carvallo Robledo, un marxista mexicano que terminó escribiendo un libro panegirista del ex narco presidente indigenista Manuel Andrés López Obrador. Pero de nuevo, no es nuestro problema, pero sí mantener nuestro propio rumbo. Entiendo que Ricardo Veisaga mantiene una excelente relación con José Manuel Rodríguez Pardo y la Revista Metábasis, hay intercambios permanentes y seguimos la revista.
A.S. —¿Que nos puede decir sobre la hispanidad y los grupos hispanistas?
S.S.C. —Defendemos a muerte la Hispanidad, pero una hispanidad que se origina con el descubrimiento y conquista del nuevo mundo, cuyo proceso termina con la Guerra Civil en la América española, no entre americanos y españoles, sino entre absolutistas y liberales. Y por tanto con el fin de la Monarquía Católica, como un hecho cerrado, clausurado en el tiempo. Una caída provocada por muchos factores, pero en especial por la influencia ideológica de la segunda generación de izquierdas, el liberalismo español, que fue la ideología de los llamados libertadores de América, es decir de los traidores a su patria que se aliaron con el imperio británico, cosa que los hispanistas no lo dicen, de eso no hablan, ejemplo de ello es Marcelo Gullo, es más, él le rinde tributo a un traidor como José de San Martín. Los llamados grupos hispanistas, en su casi totalidad son una tapadera de un supuesto hispanismo político que fue incapaz de articular un partido político y usan la hispanidad para alcanzar esos utópicos fines. Y al final, el papel que hacen es de idiotas o tontos útiles de la izquierda. ¿Un ejemplo? Santiago Armesilla Conde, un marxista emergente de la Escuela de Oviedo o de la Fundación Gustavo Bueno. Este personaje, fue quien salió a buscar la séptima generación de izquierdas entre la barbarie bolivariana, el socialismo del siglo XXI, luego de ese fracaso se convirtió en hispanista y se metió en el bolsillo a todos esos grupos de hispanistas. Todos ellos se abrieron a publicitar al felón. No solo ellos, también intelectuales que no quieren tener tratos con nosotros, pero que son compañeros de viaje de Armesilla. ¿Y ahora donde está Armesilla?, después de su estrepitoso fracaso con la vía hispanista? Su pretendida revolución marxista youtubera no tiene cabida entre la verdadera dialéctica entre Oriente y Occidente. Seguramente que, pergeñando otra manera de llegar a miles de cabezas de termo. Nunca se enteró que la séptima generación de izquierdas ya estaba en marcha.
A.S. —Se podría decir que la gran libertad y el nulo control hacia los amigos de la revista, para llamarlo de alguna manera, es algo que ustedes valoran.
S.S.C. —Ampliamente, no tenemos espíritu de secta.
A.S. —En estos últimos seis meses hubo grandes cambios en la vida política de Estados Unidos y en el plano mundial ¿Qué opinión tienes?
S.S.C. —Hubo enormes cambios que eran esperados por los votantes de Trump, lo único que hizo el nuevo presidente fue cumplir con sus promesas y por las que lo votó el electorado. En este sentido estamos agradecidos como ciudadanos que haya puesto en marcha el camino de recuperación de una potencia mundial que se marchaba hacia el abismo, pero también criticamos durante su política exterior respecto a Ucrania, ya hay varios artículos en este sentido en la revista, y el peligro de un sector interno que va tomando el control y que es un peligro. En ellos existe esa tendencia a aceptar la narrativa rusa sobre Ucrania, negociaciones que serán un fracaso sobre Irán y su política nuclear. En este sentido Israel debería actuar solo, con todo lo que eso implique, y acabar de cuajo con la amenaza iraní, es ahora o nunca. También preocupa y mucho la impasividad ante regímenes autoritarios de la región que son el soporte de los enemigos del país, como son Rusia y China.
A.S. —Bien, Sergio, te agradezco tu tiempo y espero que nos podamos reunir pronto en algún lugar del país.
S.S.C. —También así lo espero y creo que algo están gestando algunos amigos, solo falta la elección del lugar.
3 de mayo de 2025.